Wadi Rum: El desierto rojo
Cuarta semana de cautiverio. Hoy es un día especial. Toca cambio de sabanas, que ya amarilleaban y rascaban como lija. He decidido huir de todo retornando al reino de las leyendas para recordar cuando recorría el mundo buscando sirenas y tierras de djinns y dragones, oasis remotos, ciudades perdidas, islas de la felicidad o cualquier otro sueño imposible que pareciera buena idea perseguir. Y allí, en el pasado, me he topado con los recuerdos de un viaje que hice en secreto a Jordania y que hoy me dispongo a desclasificar...